26 junio, 2011

Reescribiendo la historia

Es difícil no despertar de un sueño como el que tuve...













Epilogo

La vida da muchas vueltas; a algunos les va mal, a otros peor.

Pero la mayor parte les va bien, y eso es porque así lo desean!

Porque de una u otra forma desean ser felices. Lo necesitan.

Desean encontrar esa otra parte que los fortalezca, que los complemente. Que les permita ir más allá de sus sueños.

Que los lleven a donde nadie mas los ha llevado.

Así es la vida, un juego muy difícil de entender pero muy sencillo de jugar.






Introducción.

Soñé con mis amigos.

Aquellos que siempre estuvieron ahí, en las buenas, las malas y las peores. En los momentos cumbres y en los fracasos.

En las caidas, en las perdidas, y en los momentos de conflictos. Lejos y cerca.

Soñé con un mundo donde no hubiera pasado el tiempo; en el que pareciese se hubiera detenido.

Soñé con que todos, absolutamente todos dieran sus mejores caras. Sus mejores deseos de estar juntos, como una familia.

Y soñé con que al final, ese sueño no terminara nunca.






Desarrollo

Gracias señor, gracias.

Porque al final de cuentas me diste la posibilidad de entender mil y un cosas.

De darme cuenta de que no todo esta perdido.

Que existe la lealtad, la amistad, la confianza, el gusto por estar con alguien, con varios, y con ninguno a la vez.

Por demostrarme que a pesar de todo tenemos la capacidad de cambiar, de perdonar, de querer, de amar, de respetar, de ayudar y desear lo mejor en esta vida.

Y sobre todo, el gusto por hacer que los sueños se hacen realidad.






Conclusión

Te amo.

Nunca dejé de hacerlo.

Y a pesar del tiempo nunca dejaré de hacerlo. A pesar de los altibajos y de las peleas, reproches y desvarios. De mi estado.

De los malos ratos, de los momentos de gozo, las noches interminables y llenas de gusto por estar ahí, en ese momento. Único.

Eres parte de mi vida, de mi existencia. De lo que me hace sentirme vivo; la razón por la que todos los días salgo a romperme la madre con tal de saber que, donde quiera que estés tendré un pensamiento para ti.

Siempre estas conmigo, siempre vas conmigo, y siempre será así.






Firma

Yo, Iván.

1 comentario:

McGregor dijo...

¡Hermano!

Es increible como tienes tanto y tanto que dar. Lo que escribes refleja mucho de lo que eres.

Yo también recuerdo esas epocas de la voca y esas rolas que cantabamos sin cesar, hasta quedar afónicos y con lo que pudiese ser ingerido (tequila almendrado ¡yeah!).

Gracias por tu amistad. Soy testigo de tu amistad y lo que vale, y a nombre de mi familia y mio siempre te estare agradecido por estar ahí, en esos momentos tan díficiles.

Y sin que nadie te lo pidiera.

Estamos contigo. Y si, puedes adelantar que seras Tío de un hermoso NIÑO.

Así que no olvides llamar, y ultimamos detalles ahora a tu regreso.

Que te salga bien el viaje. Lo vale.